Cuando, por fin, después de meses y meses de “cocina”, se concreta, en papeles, con sus firmas, una plataforma sindical unitaria andaluza en defensa de la Justicia, siguiendo el mandato de la plataforma unitaria sindical estatal, y
desde la que pudiera anunciarse, incluso, la convocatoria de la
huelga indefinida ( en los juzgados catalanes llevan más de un
mes de huelga*), llega el énesimo acontecimiento del #EREgate, consistente en la detención, y posterior libertad con cargos, de tres sindicalistas de CCOO y Ugt de Andalucía, siendo ésta la
excusa perfecta de unos y otros, sindicatos corporativos de los
juzgados andaluces, para romper o desmarcarse de esta unidad con el
sindicalismo de clase. Y por tanto, dar al traste con cualquier
atisbo de movilización unitaria, en la justicia andaluza, y, por
tanto, en el conjunto de la justicia española.
Un poco de historia ( quien
la olvida, la repite):
Año 2005. Bajo el lema “ La Consejería no
negocia. El Ministerio no cumple,” comienzan las
movilizaciones de los funcionarios de justicia en Andalucia, en el
marco de una convocatoria unitaria en el conjunto de España,. Marzo
2005, portada en la prensa gaditana: “ LOS FUNCIONARIOS DE
JUSTICIA SE REBELAN CON UNA HUELGA MASIVA” La Junta
admite un seguimiento del 85 % en los juzgados gaditanos”
En Andalucía, dichas
movilizaciones culminaron, meses después, con un principio de
acuerdo, el 16 de Junio, y finalmente acuerdo marco, en Julio, por el
que se consiguieron el cien por cien de las reivindicaciones de la
plataforma unitaria: un nuevo modelo retributivo, con nuevos
complementos salariales, y nuevos derechos sociales, con el primer
manual de licencias, permisos, vacaciones, incluso con mejoras que hasta
años después no alcanzaron al conjunto de la función pública
española, a través de la negociación y acuerdo del EBEP., nueva normativa de interinos, etc. A pesar
de ello, el sindicalismo corporativo de los juzgados andaluces, que
había estado agazapado, como siempre, al comienzo de las
movilizaciones, que incluso boicoteó, de forma explícita, el
comienzo de las mismas, no apoyó el acuerdo. Sus motivos, pura
demagogia sindical, esgrimidos incluso ante el Tribunal Supremo,donde perdieron, uno tras otro, sus recursos, con sus condenas en costas, acabaron engullidos por el desagüe del
olvido. ( ¿ya nadie se acuerda del cuento del C.P.T., y tantos y
tantos cuentos?) Cómo no, pasaron años, y su estrategia
electoralista ya había tenido éxito. Ahora son mayoritarios, muy
mayoritarios en el conjunto de la justicia andaluza, algo que va
pasando poco a poco, siguiendo este modelo, en muchos otros ámbitos,
donde se va instalando el sindicalismo “profesional”,
“gremialista”, "propio y exclusivo" ( ellos en su casa, a lo suyo, y CCOO en la calle, a lo de todos) y también por ello, han desbancado a CCOO del
liderazgo sindical en el ámbito del conjunto de la administración
de Justicia española, especialista, este sindicato si, siempre, en
dar la cara, en la defensa de los derechos de los trabajadores, sea
el ámbito que sea, incluso para que te la partan.